(Basado en el primer capítulo del libro del Génesis).
En el principio Dios creó los cielos y la tierra.
En el primer día, Dios creó los cielos, la tierra, el día y la noche.
En el segundo día, Dios separó la expansión (a la que llamó cielo), de las aguas que llamó mar.
Luego en el tercer día, Dios separó las aguas de la parte seca y a las aguas les llamó mar y a la parte seca la llamó tierra.
También en el tercer día Dios creó la hierba, los árboles, los frutos y los puso en la tierra. Así hubo plantas que daban frutos y semillas.
Para el cuarto Día Dios creó al sol, la luna y las estrellas. Las puso en el cielo. El sol en el día y la luna y las estrellas en la noche.
Dios, en el quinto día creó a los animales. Grandes, chicos, que estan en el mar y a los que están sobre la tierra. También a los que vuelan en los cielos.
Y al fin... Llegó la creación del hombre y la mujer. Esto pasó el sexto día. Los creó a su imagen y semejanza. Iguales a Él.
Todo fue creado por Dios; desde las plantas, el mar, los animales, las aves, los árboles y por supuesto, al hombre. Ahora Dios contempló todo lo que había hecho, lo bendijo y vio que era muy bueno. Este día, el séptimo, lo usó para reposar de toda su obra y bendecirla.
¡Dios es tan bueno! Él quería tener una familia y nos creó a nosotros. A tí y a mí. Pues nos ama tanto que quiere que nosotros seamos parte de su familia.